Radio emisoras Pio XII
La Voz Católica Minera
Testimonio del editor MAURICIO AIRA
previus. Pio XII se fundó en Siglo XX, Bolivia el primero de abril de 1959. durante un mes, salió al éter en forma experimental. un mes después con motivo de San José Obrero, o Dia del Trabajo, se dejó oir en el aire con la marcha sobre el Rio Kwia. su nombre vino a sugerencia del editor, porque el fundador Sacerdote Lyno Granier OMI, quería llamarla "la voz católica minera" era muy largo dijo Mauricio, Radio Pio XII, es más corto y significa lo mismo. el Pontífice acababa de fallecer y su vida había marcado de cerca la vida de los últimos años de una guerra cruenta y dolorosa.
nació Pio XII para llevar alegría y esperanza a los hogares mineros, anegados por el ateismo y el troskysmo secante de algunos dirigentes mineros que mantenían la emisora "Siglo XX la voz de los trabajadores mineros" ubicada en el mismo sindicato de la plaza del mismo nombre.
Lyno Granier pleno de vida y de emoción misionera era el párroco de Siglo XX y estaba secundado de dos jóvenes sacerdotes también de origen canadiense Santiago Gélinas y Claudio Moliere que coadyuvaron en la emisora, el primero en la parte cultural y el segundo en las finanzas.
Mario Otero, profesor y Gastón Dick, profesor fueron los primeros locutores a medio tiempo, mientras que Mauricio Aira fue contratado en la ciudad de La Paz, para trabajar a tiempo completo y vivió en la misma casa parroquial. su voz estuvo presente desde el primer momento. la historia que cuenta ERBOL, es parte de la verdad, pero no toda, que ojalá podamos abordar, como el testimonio personal de nuestra presencia en PIO XII durante cinco años.
Nació un primero de Mayo de 1959, cuando el Papa Juan XXIII abrió las puertas de la Iglesia Católica al Concilio Vaticano, la teología de la liberación se fundía en la opción preferencial por los pobres, Cuba se levantaba socialista, empeoraba la confrontación entre las Repúblicas Socialistas Soviéticas y Estados Unidos.
En el Norte Potosí, el comunismo asomaba fuerte entre mineros, pero los ayllus aymaras hacían tregua en su sueño de reconstituir su territorio y su nación.
Imagínese: Una radio que camina, hace comunicación andante, con raíces en los pueblos originarios del Norte Potosí, bautizada en los evangelios del minero boliviano y experimentada en trabajos comunales de vecinas y vecinos de barrios populares.
Activista a morir, metida en los socavones, en las movilizaciones populares, presente en la siembra y en la cosecha. Esta es la Radio Pio XII, la casa del pueblo.
Este primero de Mayo, el padre Roberto Durette, su director general, celebrará una misa en el templo nuestra señora de los obreros de Siglo XX.
A las 6 de la tarde el dúo Negro y Blanco estrenará una morenada dedicada a la PIO y abrirá un festival de música nortepotosina.
Nació en la cuna de sindicatos mineros y ayllus.
“La Pio” nació a más de tres mil metros sobre el Nivel del mar, en la cuna del sindicalismo y del comunismo boliviano y de los ayllus aymaras de Bolivia.
Sus padres, los misioneros católicos Oblatos de María Inmaculada del Canadá, Estados Unidos, España y otras regiones del mundo, tenían la misión imposible de luchar contra el alcohol y contra el analfabetismo.
Eugenio Mazenod, su fundador negó a la nobleza, su clase, influenciado por la revolución francesa, hacía misas entre prostitutas, obreros, menesterosos y gente excluída, llevó la Iglesia allí donde nadie llegaba.
Fundaron la Radio con el rostro minero y del campesino-indígena.
Coco Manto uno de sus locutores dijo: “La Pio” nació con el evangelio en la mano, pero desde la vida cotidiana de mineros e indígenas. Con su potencia llegó a los habitantes de los rincones más olvidados del Norte Potosí.
Madruga para alegrar, informar y acompañar.
Se levanta a las 04.30. Enciende 10 kilowatts de onda corta y 10 kilowatts de onda media. Empieza su jornada junto a mineros y campesinos, sin sol y aún con luna, sorbiendo caldito caliente para matar el hambre o algún qoqawi matahambre.
Con cuentos, poesías, música y canto quechua-aymara saluda el amanecer minero-campesino con el Rijch´ariy Ñawisitu (despierta ojito).
A las 06.00, sus emisoras de Frecuencia Modulada en Oruro y Cochabamba, junto al satélite y la Red de Radios del Valle cochabambino y la Red de Radios orureñas, arman el primer informativo en castellano, PIO XII en contacto.
Desde las provincias, poblaciones urbanas hablan campesinos, mineros, vecinos de barrios populares, responden dirigentes, alcaldes, subprefectos, prefectos y ministros.
La otra cara de la historia.
La máquina del tiempo enseña historia hecha por los oprimidos. La noticia evangelizadora enseña el otro evangelio: una mezcla de fé y contenido humano. No faltan las cotizaciones de minerales y tampoco noticias desde los rincones mineros.
Miles de mensajes quechuas y aymaras salen por sus ondas, algunos mensajeros lloran, otros ruegan, los más saludan a sus familiares en todos los rincones del Norte Potosí.
A las 19.00 de todos los días, el k´uychi (arcoiris), ofrece debate, risas y pensamientos quechuas. La Radio sube la voz de los quechuas al satélite para construir la Patria Grande con noticias y mensajes. Es el Jatun Llajta Misk´i Simi (pueblo grande de lengua dulce) difundido en varias radios de habla quechua en Sudamérica.
A las 20.00, los aymaras se apoderan de la Radio. Desde Oruro hasta Potosí, desenvainan su idioma y se comunican por la Pio.
“Levantar a los indios”
A fines de los 60 y principios de los 70 alfabetizó. Le acusaron de “levantar a los indios porque luego no respetarían a la gente de los centros urbanos”.
En 1984, en plena agonía de la Comibol, la Pio dijo: “producir más, poner el hombro a la empresa”, la acusaron de colaboracionista.
En 1986, año de la relocalización y migración, pidió a los mineros no abandonar los campamentos: “Cochabamba no es un paraíso como parece”.
El padre Roberto Durette, director de la Pio, sembró flores entre las piedras de Siglo XX, como símbolo de esperanza y desafío a la muerte.
En 1987, cuando el gobierno dio visto bueno a la creación de cooperativas mineras, habló sin miedo: “el gobierno se está lavando las manos, entrega el cerro sin apoyo técnico”.
En 1994 y en 1996 denunció a la oligarquía y al saqueo minero, sembró la defensa de los recursos naturales: “Dios puso las riquezas para beneficio de todos, pero sólo unos cuantos aprovechan, el pueblo debe conseguir y beneficiarse de lo que le pertenece”.
El gobierno mandó militares y quiso acallar a la Radio, dejó nueve muertos y unos 50 heridos en la masacre del oro, en Amayapampa y Llallagua.
Entre dictadura, militares y opositores a la PIO.
1967, Gobierno de René Barrientos amenaza a los padres Oblatos por su acercamiento al pueblo.
1969, los militares toman Radio Pio XII, en el gobierno de Alfredo Ovando Candia.
1975, cierre y destrucción de equipos de la PIO XII por orden del dictador Hugo Banzer Suárez.
1978, intervención a la Radio y detención de sus trabajadores.
1978, intentos violentos por acallar la emisora.
1980, cierre de la emisora, decomiso de equipos y persecución del personal.
1986, detención del subdirector Gustavo Pelletier y del personal de la Pio durante la marcha por la vida.
1987, sabotaje a la emisora con cortes de energía eléctrica.
1991, atentado dinamitero a Pio XII.
1994, gobierno presiona para que la Pio deje de difundir la Defensa de los Recursos Naturales.
1996, militares intentan tomar la Radio, se descubre el plan gubernamental para acallar la emisora, durante la masacre de Amayapampa y Llallagua.
2003, seguidores del gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, dinamitan los equipos transmisores de Radio Pio XII-Oruro durante las jornadas de la guerra del gas.
Durette afirma “la historia de la Pio es una gran parábola. Nos habíamos puesto del lado del pueblo. A la Pio la convirtieron los mineros, las señoras, los campesinos, la lucha popular, ellos nos hicieron entender el evangelio y el riesgo de la fe”.
La Pio XII participó en la Cadena Nacional Minera resistiendo a la dictadura de García Meza. Acompañó de principio a fin a mineros y campesinos en sus congresos regionales y nacionales.
Radio para el desarrollo
Cincuenta y cinco años vividos le dan autoridad para decir que es posible una comunicación para el desarrollo. ¿Cómo es posible esto?
El sacerdote Roberto Durette, su actual director, asegura: “Desarrollo no sólo se hace con el micrófono, sino estando presente cada día, cada momento junto al pueblo, movilizando a la gente para que mejore su vida y construya con sus manos, su futuro”.
En el trabajo presencial la Radio interviene, acompaña y promueve actividades, mediante un equipo multidisciplinario, en las poblaciones y comunidades del Norte Potosí. Es estar en contacto directo con mineros, indígenas y vecinos, comunicarse con ellos, coordinar, planificar, ejecutar, evaluar y proyectar acciones para beneficio de todos.
La mamá grande de la Red cumple 55 años.
En los años 60 fundó junto a otras radioemisoras, Escuelas Radiofónicas de Bolivia (Erbol), hoy convertida en Red y de gran audiencia en todo el territorio boliviano.
Siguió creciendo tras afiliarse a la Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica (ALER) con noticieros y programación satelital para Sudamérica.
En los años 90, elevó la voz de los quechuas al satélite para ayudar en su integración y unión en el sur del continente americano.
Desde 1992 hasta 1999, capacitó a 500 reporteros populares para que el mundo conozca cómo se vive, qué sueñan y qué quieren los indígenas de las comunidades más olvidadas del país.
Los reporteros, difunden noticias de sus comunidades, se convirtieron en líderes para promover el desarrollo de sus regiones. Muchos llegaron a concejales, alcaldes, subgobernadores y algunos asambleístas departamentales y también nacionales.
En los años 90, fundó dos redes de radios provinciales: Red Radios en Acción, en el departamento de Oruro y Potosí, y la Red del Valle. Objetivo: acercar a las autoridades de la capital de departamento con las poblaciones de las provincias y municipios y ayudar a construir la nueva Bolivia.
Hace 15 años tuvo su bebé en Oruro, una Radio de Frecuencia Modulada. Hace 14 años, le nació la FM en Cochabamba. A las dos las llamó Pio XII. Juntas construyen la red Pio XII.
El trabajo de la Radio se extiende con fuerza a Sacaca y San Pedro en el Norte Potosí, este año ingresará con fuerza en Toro Toro y Pocoata. Retornará a la capital potosina.
Su actual director Roberto Durette afirma que en tiempos de autonomía se requiere integrar más a las regiones.
Radio Pio XII cuenta con más de 2 mil horas de grabación del movimiento popular boliviano en su cintateca: Juan Lechín, René Barrientos, Juan José Torres, Marcelo Quiroga Santa Cruz, Víctor Paz y Jaime Paz Zamora , Federico Escóbar, Artemio Camargo, Eduardo Galeano y otros más viven en la memoria de la Pio.
¿Qué quiere y a dónde va la PIO XII?
Inspirada en la relectura del evangelio, en la vida de indígenas, mineros y poblaciones urbanas excluidas, construye un proyecto político para dignificar al ser humano, a través de la democracia participativa, defensa de la vida, democracia y la comunicación educativa popular para el desarrollo.
Más de 50 comunicadores en Oruro, Potosí y Cochabamba. Tres radioemisoras, dos de Frecuencia Modulada, una de 10 kilovats de onda corta y 10 de onda media.
Potenciar la participación de las comunidades para decidir más su futuro en cumbres y consejos de Desarrollo, lograr mayores beneficios de los recursos naturales, contar con más caminos, más electrificación y sobre todo crecer como personas y ganar en humanidad, son el pan de cada día en estos tiempos.
La Radio con presencia en el satélite y en Real Audio. Una RED de emisoras integradora de Oruro, Potosí y Cochabamba, dos subredes, en Oruro y en Cochabamba.
Con raíces en las poblaciones indígenas, mineras y urbanas excluidas. Con experiencia en los temas mineros, indígenas y municipales
Radio en el internet, twitteando y feisbuqueando.
La población puede escuchar la programación de las tres píos ingresando en esta página y captando el real audio de las tres radioemisoras.
