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sábado, 27 de septiembre de 2008

causa risa e indignación comparar a Eva Perón con evo huevón, dicen

bolivianos en argentina que publican todaybolivia, se han referido a una crónica aparecida en méxico y han glosado su contenido: Si Argentina tuvo a su Eva, Bolivia tiene a su Evo. La primera vivió hace décadas en un país de antagonismos y contrastes y encarnó, como pocos, la lucha social; el segundo, gobierna una Nación que es un polvorín político lleno de pobres.

La mítica Evita de rostro blanco fue como una cenicienta que en su corta vida pasó de la pobreza extrema (cuál fue la verguenza extrema por que pasó evita?) al poder y la gloria; Evo Morales es, a su vez, un indígena de rostro oscuro cuyo sueño es refundar Bolivia y hacerlo solidario con los que nada tienen. Morales es hijo legítimo de la pobreza, esa que aflora a flor de piel, que camina por las calles con el rostro cabizbajo de sus indígenas y baja desde los cerros para instalarse en la periferia de la ciudad.

Eva Perón fue una mujer hermosa, de andar cadencioso; Evo, el indio aymara cuyo norte político es la revolución cubana y sus referentes son Fidel Castro y Rigoberta Menchú, no camina, sino que juega al fútbol, otra de sus pasiones. Eva y Evo, dos culturas distintas, dos personajes atados por una misma causa: buscar que la justicia social l(de qué justicia social hablan en bolivia, acaso los cocaleros son asalariados, son empresarios y no de los pequeños con casas, camiones y dinero, si vieran ustedes las fiestas millonarias que hace, muchos de ellos mexclados con la cocaína) lo mismo llegue al campo que a la zona más refundida de la sierra o en las pampas orientales con olor a caña.

"Evo es para nosotros como un padre que nos protege. El es de los nuestros. Ha padecido el pobrecito, pero los ricos quieren que no gobierne porque él va a repartir todo. (qué es lo que evo va a repartir, mayor pobreza? o las casas y tierras fruto del esfuerzo y del trabajo de una clase media empobrecida?) Es como un padre que no deja que sus hijos pasen hambre", afirmó Ramiro Canalla. Don Ramiro es un anciano del mercado informal "El Poder", donde el caos es total, calles empedradas y reducidas, banquetas atestadas de vendedores ambulantes, autobuses que parecen chimeneas e indígenas que venden artículos de contrabando.

El seguidor de "El Evo", como llaman al Jefe de Estado, recibe 200 bolivianos mensuales (unos 28 dólares) de la llamada Renta Dignidad que el gobierno de Morales otorga a las personas de la tercera edad. Al igual que Evo, que a principios de los años 80 emigró junto a su familia al este de Bolivia donde se dedicó a la agricultura, entre ellos el cultivo de coca, don Ramiro es un hombre de unos 70 años que vino a La Paz con su hambre y pobreza a cuestas. En La Paz, el presidente Morales es un ídolo y es visto como un ejemplo, ya que de pastor de llamas y jefe sindical de los cocaleros se convirtió en el primer mandatario indígena de Bolivia.

A diferencia de Eva, la esposa de Juan Domingo Perón, que desde su infancia tejió el sueño de ser actriz, Evo Morales no buscó el poder, sino que la oportunidad le llegó sola y su lucha social quedó registrada en el documental "Cocalero". (claro que buscó el poder a sangre y fuego, incendió bolivia durante diez años para conseguirlo) A pesar del poder que ejerce, Morales no ha perdido su sencillez y gustoso come la sopa que le sirven en "Alfa 330", la clave con que se conoce la casa Presidencial de San Jorge, donde dispone de ambientes casi vacíos.

A Evo le gusta descansar, cuando tiene tiempo, en la casa protegida con cortinas bordó, semi-acostarse en los sillones color rosa desgastados, frente a un televisor de pantalla plana. Uno de sus platos preferidos es la sopa de carne, cortada en tiras, aderezadas con pimientos, una especie energizante para un hombre que arranca la jornada a las 04:00 horas en una gélida ciudad donde no dan ganas de levantarse por el frío de siete grados centígrados. Evo, aunque a veces luce jeans o camisas desgastadas por el tiempo, viaja en un BMW presidencial, le gusta jugar paleta y tomar siesta, pero el trajín se lo impide.

Está con un sólo horizonte: trabajar por los pobres en una nación donde las desigualdades son crecientes. Al igual que Eva, Evo recorre todo, se entera de todo y controla todo. Evo, el cocalero, Evo el presidente, Evo, el jefazo.ABI//

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