Ayer se produjo la llamada “Cumbre de poderes”, que fue convocada desde el Ejecutivo que colocó en agenda cuatro temas, siendo el principal el de la seguridad ciudadana, situación que dio lugar a que el Presidente ,quien presidió junto con el vicepresidente la reunión, concluyeran al cabo de la misma que se deben endurecer las penas a Fiscales y Jueces que fueren encontrados llevando a cabo procesos en los que sean encontradas en faltas contra la seguridad ciudadana, es decir no llevando a cabo las sanciones drásticas necesarias en casos que sean considerados como graves para la “ciudadanía y su seguridad”. Hasta aquí todo parece muy lógico, pero si abrimos las costuras y vemos el revés de las intenciones que realmente parece traerse esta reunión, nos encontramos con que al inicio de la misma toda la artillería del Presidente estuvo dirigida a hablar del supuesto caso de terrorismo que se ha vuelto una verdadera obsesión y el objetivo prioritario del Ejecutivo en la presente etapa electoral.
Como ya nos estamos acostumbrando a comprobar de que nada que sea digitado desde el palacio de gobierno es casual o se debe sólo al sano interés de brindarle un servicio a la ciudadanía, pudimos constatar que al mismo tiempo que se desarrollaba la cumbre que aparentemente trató el tema de la seguridad ciudadana y el del terrorismo, mientras las cámaras televisivas se encontraban pendientes de esa mesa encabezada por el Presidente y Vicepresidente de Bolivia, un grupo de policías enmascarados y armados entró en forma violenta en la fiscalía de Cobija- Pando para robar los expedientes del caso de Porvenir, se dice que había un avión esperando para trasladar inmediatamente los expedientes a la ciudad de La Paz, expedientes en los que por un mandato de la justicia el caso volvió a radicar en su jurisdicción de origen que es Pando por lo que los detenidos que se encuentran actualmente en el penal de San Pedro en La Paz, deberían retornar a su jurisdicción natural para que allí se lleve a cabo el debido proceso.
En virtud de este hecho estamos en la posibilidad de afirmar que la denominada “Cumbre política” fue una vez más una cortina de humo, otro escenario montado para burlarse del poder judicial que es ahora un poder cautivo, secuestrado en manos del gobierno actual que ha destituido al Tribunal Constitucional, que tiene perseguido al presidente de la Corte de Justicia y ahora le propone a la presidenta en función que se endurezcan las penas, seguramente que para juzgar más duramente a aquellos magistrados, jueces y fiscales que el gobierno considere que no cumplen con su papel de proteger los dictámenes e intereses del Ejecutivo, obedeciendo con fallos que sean favorables a la interpretación que el gobierno le da la a lo que se considera seguridad ciudadana y delito contra las personas y el país.
No es mucho lo que podemos decir después que la denominada cumbre política se convirtió en una cumbre borrascosa, que dirigió todo al molino en el que el Ejecutivo tritura la justicia y nos vuelve a demostrar que nos apaga la luz cuando le da la gana, corta el interruptor a su antojo y después del click, nos deja en segundos en la total oscuridad de la persecución, de la violencia, de la manipulación a regalado gusto y placer. Las personas decentes que pretenden vivir con reglas de juego claras, con leyes, con acciones que no nos conduzcan siempre al mundo enrevesado de las vestiduras de doble cara, tienen que sentirse profundamente consternadas viendo que nuestro país es una selva y una jauría donde se practica por deporte la inseguridad y el desapoderamiento jurídico. Se constata así que desde el Palacio de Gobierno se volvió a dar un nuevo síncope de bla, bla, bladuría politiquera que implica un nuevo abono para el sembradío de cizaña que prolifera y está matando los verdes pastos en los que soñamos vivir algún día.
Anoche hubo un nuevo y peligroso apagón, alguien volvió a bajar la palanca desde el Palacio Quemado y ¿qué dirán ahora los que se tragaron la blabladuría, los blabladores y los enmascarados policiales que se birlaron los expedientes de Pando?
Otra vez el caso de Pando ha quedado sumido en la oscuridad de las tinieblas provocadas para retorcer e invisibilizar las investigaciones, para dejar que las tinieblas maten a la luz de la verdad que sigue siendo atacada, asaltada y tomada como rehén.
Lo mismo vale para el paralelo del llamado caso de terrorismo de Santa Cruz, donde la manipulación no ha tenido tampoco límites y cuando se sepa la verdad el plop puede ser total, porque hay muchos intereses que tratan por todos los medios de no liberar la verdad, aunque seguramente esta finalmente se impondrá pese al sufrimiento y las duras pruebas que tendrán que pasar nuestros pueblos ahora sometidos.
Por el momento se compra y se vende cualquier cosa en las mismas puertas del Templo, mientras en otros altares se llevan a cabo las tétricas cumbres de los desapoderados. (De Centa Reck, aparecido en Facebook)
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